La pasión de Juliana González por la protección de las cuencas hidrográficas y el trabajo con comunidades de bajos ingresos comenzó al principio de su carrera. Originaria de Colombia, Juliana trabajó en el desarrollo de políticas de planificación de cuencas hidrográficas en los Andes antes de trasladarse a Estados Unidos. Durante los últimos 16 años, primero como gestora del programa comunitario de The Watershed Project (TWP) y después como su directora ejecutiva, Juliana González ha dirigido múltiples iniciativas comunitarias de restauración y planificación para la adaptación y mitigación del cambio climático en Richmond y sus comunidades vecinas.
Bajo el liderazgo de Juliana, TWP ha forjado una conexión duradera con la comunidad del norte de Richmond, donde trabaja en estrecha colaboración con los líderes comunitarios. Ella trabaja para conectar a la comunidad local con su cuenca a través de proyectos de educación, restauración y planificación comunitaria.
Juliana cree que las soluciones basadas en la naturaleza son la única forma de mitigar e innovar eficazmente contra los impactos del cambio climático. “Cada árbol plantado en nuestro barrio ayuda no sólo a mejorar el aire, sino también a almacenar el agua y a enfriar la tierra”, afirma. “Los paisajes naturales aportan muchos beneficios a todas las personas y a la fauna que los habitan”.
El trabajo de Juliana ha llevado a las comunidades a la mesa de toma de decisiones, brindando a las personas afectadas por la injusticia medioambiental la oportunidad de actuar y mejorar sus barrios.
Empezó a trabajar en la zona de North Richmond Shoreline en 2010, apoyando el proceso de creación de un nuevo parque al sur de Point Pinole. Este esfuerzo fue el comienzo de un enfoque de múltiples beneficios para hacer de Richmond Norte un ejemplo de resiliencia climática y planificación participativa comunitaria.
“Al ser una comunidad muy afectada y desfavorecida social y económicamente que se encuentra apenas unos metros por encima del nivel actual del mar, Richmond Norte podría ser un gran caso de estudio de cómo una comunidad pobre de residentes mayoritariamente BIPOC puede ayudar a transformar sus barrios y su paisaje para que sean más verdes y resistentes al cambio climático”, afirma.
En 2017, durante el Desafío Resiliente por Diseño, Juliana recibió el encargo de servir de enlace comunitario para el equipo de diseño que imaginó North Richmond en el año 2100, y dirigió la Junta Consultiva Comunitaria.
En los últimos años, Juliana ha sido una líder clave en el proceso de planificación participativa de la adaptación de la costa de North Richmond. Su visión se ha centrado en la educación y el compromiso de la comunidad, garantizando que este proyecto de infraestructura verde a gran escala beneficie a la salud de las personas al tiempo que protege a los residentes de la subida del nivel del mar.
Además, Juliana y TWP han sido líderes en la educación sobre las cuencas hidrográficas desde el jardín de infancia hasta los 12 años en lugares como la escuela primaria Verde, y en la restauración de los tres arroyos que drenan las cuencas hidrográficas de la bahía de San Pablo. Juliana también trabaja para promover el reverdecimiento urbano y la plantación de árboles, aumentando la transitabilidad de la comunidad y la salud medioambiental en general.
Desde el momento en que se incorporó a TWP, Juliana ha liderado numerosas iniciativas para transformar el norte de Richmond en una zona prometedora para la protección y la integración de las cuencas hidrográficas en la salud de la comunidad.